El género distópico que tanto éxito ha tenido en el mundo del cine, tuvo su origen en el mundo de la literatura. Concretamente, en la obra 1984 del escritor y periodista británico Eric Arthur Blair, más conocido como George Orwell. Publicada en 1949, plantea una sociedad imaginaria, en la que impera un régimen totalitario y represor cuyo objetivo es conseguir la alienación del ser humano. Este planteamiento nació de su observación de la convulsa sociedad que le tocó vivir con el fin del colonialismo británico, la aparición de los totalitarismos fascistas y estalinistas, las dos guerras mundiales y el nacimiento del capitalismo.
En su novela, Orwell creó el concepto de «Gran Hermano», que desde entonces ha pasado al lenguaje común de la crítica de las técnicas modernas de vigilancia. El éxito de 1984 ha hecho que se utilice el adjetivo orwelliano para referirse a los distópicos universos totalitarios que imaginamos y que últimamente se han puesto tan de moda.
Repasemos algunas distopías famosas. Soy leyenda, la novela publicada en 1954 por Richard Matheson; El planeta de los simios, del francés Pierre Boulle; Clockwork Orange (traducido como La naranja mecánica) es una novela del escritor británico Anthony Burgess; el escalofriante Cuento de la Criada de Margaret Atwood, publicada en 1985, el Ensayo sobre la ceguera, del premio nobel portugués José Saramago.
Seguro que se les ocurren muchos más ejemplos. Lo preocupante, si lo piensan es que lo único que tienen en común todas las distopías planteadas es que cualquier sociedad futura que imaginamos, postapocalíptica o no, nos pone los pelos de punta.
La Réplica de Pris es la columna informativa de Marisa Cruzado que se emite en el programa de tecnología de Onda Regional de Murcia, la Revolución Espectral. Escuchar el programa completo aquí.